El Tribunal Oral Federal N° 1 de Rosario condenó ayer a  Brisa Milagros Leguizamón Ferreyra y a Esteban “Pinky” Rocha por una causa de narcomenudeo que se remonta a varios años antes de la llamada “boda narco” de Ibarlucea, la celebración de enero de 2022 que terminó marcada por un triple crimen a la salida del salón de fiestas. La sentencia, producto de un «juicio abreviado», les impuso a los novios diferentes penas: cinco años de prisión para Leguizamón y cuatro años de prisión efectiva para Rocha. Sin embargo, en el caso de Brisa, el tribunal le computó el tiempo de arresto domiciliario que cumplió tras ser extraditada desde Paraguay en 2023, lo que le permitió recuperar la libertad inmediatamente después de la audiencia. Rocha, en cambio, seguirá detenido.

La causa por la cual fueron condenados no guarda relación directa con el triple homicidio de Ibarlucea. Se trata de una investigación iniciada entre 2016 y 2019 sobre una red de venta minorista de drogas en distintos barrios del norte de Rosario, principalmente en El Churrasco y Parque Casas.

De acuerdo con el expediente, los novios integraban los eslabones bajos de una organización encabezada por Olga Beatriz “Tata” Medina, una mujer de peso en el negocio del narcomenudeo de la ciudad. Según las pruebas recolectadas, la estructura tenía como objetivo distribuir estupefacientes en pequeñas cantidades y se sostenía con múltiples “puestos” de venta en distintos puntos de Rosario.

La “Tata” Medina fue condenada en 2023 a seis años y medio de prisión, junto con otros integrantes de su banda. Por entonces, Brisa y Rocha estaban prófugos y recién fueron capturados en Asunción, Paraguay, en enero de ese año.

El 29 de enero de 2022, cuando el expediente por narcomenudeo ya estaba en marcha pero aún sin resolverse, Brisa y Rocha celebraron su casamiento en un salón de fiestas de Ibarlucea. El evento convocó a decenas de invitados, varios de ellos vinculados a grupos ligados al narcotráfico.

Al retirarse del lugar, tres personas fueron asesinadas en una emboscada: un hombre de 33 años, su pareja de 25 y la hija de ambos, de apenas un año. Se trataba de Iván Giménez (33), su pareja, Erica Romero (37), y Elena, su hija de un año y medio, fueron acribillados cuando salían del casamiento a bordo de un Audi TT. La investigación de ese triple crimen no tiene detenidos, aunque sí sospechas, y dejó al descubierto a un jugador narco hasta entonces encubierto.

El 8 de marzo de 2022 cayó detenido en un country de Córdoba Fabián “Calavera” Pelozo, oriundo de Ibarlucea y proveedor de droga de Giménez. En los años posteriores, Calavera acumuló dos condenas por tráfico de grandes volúmenes de cocaína y hoy es considerado un preso de “alto riesgo” en la cárcel de Ezeiza, aunque nunca fue acusado formalmente por el triple crimen de la boda narco. Los atacantes abrieron fuego contra el vehículo familiar y los acribillaron. Ese episodio, conocido como el triple crimen de Ibarlucea, quedó en la memoria pública como uno de los hechos más impactantes de la violencia ligada al narcotráfico en la región.

La pareja de novios no fue imputada en esa causa. La investigación sobre la masacre sigue abierta y sin acusaciones firmes, aunque los fiscales sospechan de vínculos con disputas entre bandas.

Lo cierto es que después del casamiento y de la masacre, Brisa y Rocha huyeron de Rosario. La pista los llevó hasta Paraguay, donde en enero de 2023 fueron localizados en un edificio de departamentos de Asunción. Según informó la prensa local, estaban radicados allí junto a sus hijos y mantenían un perfil bajo hasta que fueron descubiertos.

Tras la detención, se inició un proceso de extradición que culminó en agosto de 2023, cuando ambos fueron trasladados a la Argentina para quedar a disposición de la Justicia federal. Durante esos meses, Leguizamón permaneció bajo arresto domiciliario, una medida que finalmente fue computada como tiempo de detención cumplido en la sentencia actual.

Ahora bien, cabe aclarar que la condena dictada esta semana se resolvió mediante un acuerdo abreviado entre la defensa, la fiscalía y el tribunal. Ese mecanismo permitió cerrar la causa de narcomenudeo con condenas firmes sin necesidad de un juicio oral extenso.

En el mismo trámite se acordó que Brisa Leguizamón fuera condenada a  5 años de prisión, pero como ya cumplió más de tres años bajo arresto domiciliario, quedó en libertad. Mientras Esteban Rocha fue condenado a 4 años de prisión efectiva y continuará detenido en una unidad federal. El fallo también homologó las condenas previas de otros miembros de la banda, incluyendo a la líder **Olga “Tata” Medina**.

El abreviado fue convalidado por los jueces del TOF 1 Germán Sutter Schneider, Elena Dilario y Ricardo Moisés Vázquez. Con esta resolución, la Justicia federal dio por cerrado el expediente de narcomenudeo que llevaba casi una década en trámite. Sin embargo, el caso más grave —el triple crimen de Ibarlucea sigue sin definiciones. Hasta el momento, no hubo imputaciones firmes contra los novios ni contra los organizadores del casamiento por los hechos ocurridos esa noche. La investigación busca determinar quiénes ordenaron la emboscada y con qué motivación, pero los avances han sido limitados.

El caso de la “boda narco” sigue siendo un emblema de la violencia ligada al narcotráfico en Rosario y un expediente pendiente para el sistema judicial.