Los trabajadores de rampa realizaron una medida de fuerza con asambleas en la terminal aérea porteña, lo que generó demoras.
La medida impulsó una nueva denuncia del Gobierno contra una organización gremial aeronáutica, ahora por “secuestro de pasajeros”. El vocero Manuel Adorni aseguró que se trató de una maniobra de “un terrorismo sindical que para no perder sus privilegios, desde hace meses pretende poner en jaque el sistema aerocomercial de la Argentina”.
“El gobierno va a ir a la Justicia por abandono y secuestro de personas, intimidación pública y bloqueo. El que las hace las paga”, sentenció el funcionario, parafraseando a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Al mismo tiempo, se conoció que el Gobierno libertario amenazó a los gremios con presentar una prepuesta este viernes, a cambio de no cerrar Aerolíneas Argentinas.
En este sentido, el Poder Ejecutivo exige una plan de trabajo para que la compañía de bandera opere sin conflictos gremiales. En caso de que la propuesta de los aeronáuticos no satisfaga al presidente Javier Milei, llevará a cabo un Plan Preventivo de Crisis que terminará en su cierre definitivo.