Los intendentes neutralizaron la ofensiva de Espinoza y partieron el bloque del interior.
Lenta pero inexorablemente, el peronismo dialoguista comienza a endurecerse y a confluir con sectores más afines al kirchnerismo para avanzar contra Mauricio Macri y María Eugenia Vidal. La nueva postura del partido quedó plasmada en la cumbre de este sábado en San Bernardo, a la que se sumó el gremialista Roberto Baradel.
La presencia del titular de Suteba fue sorpresiva porque no forma parte del PJ y va en línea con la nueva posición más firme del PJ contra el gobierno que proclama la nueva conducción encabezada por Gustavo Menéndez y Fernando Gray.
En San Bernardo se vivía este viernes un clima de entusiasmo por parte de los intendentes peronistas, que hablaban del éxito que tuvieron para neutralizar la jugada de Fernando Espinoza y Verónica Magario, que como contó LPO decidieron pegar el faltazo e intentaron boicotear la cumbre.
Incluso algunos interpretaban que el propio Hugo Moyano retó al matancero por su intento de vaciarles la reunión, cuando opinó en una entrevista televisiva que no es momento de “pavadas personales” sino de unidad, en un guiño a Cristina Kirchner.
En este escenario, no resulta casual que Pablo Moyano forme parte de la nueva conducción del PJ y este viernes se lo haya visto fundirse en un abrazo con Baradel, en un evento que tuvo otra presencia significativa del sindicalismo porque apareció el metalúrgico “Barba” Gutiérrez.
