La tensión entre el Gobierno y los trabajadores del Hospital Garrahan sigue en aumento, y la defensa oficialista quedó en el centro de la polémica tras las declaraciones de las diputadas libertarias Lilia Lemoine y Juliana Santillán. En su intento de deslegitimar las protestas por el desfinanciamiento del hospital pediátrico, ambas legisladoras cometieron errores graves y desataron críticas, incluso desde dentro del espacio que lidera Javier Milei.

El conflicto con el personal del Garrahan escaló luego de semanas de paros, movilizaciones y reclamos por mejores condiciones laborales y salariales. A las protestas se sumaron sectores como el CONICET y organizaciones sociales como Ni Una Menos, que también acompañarán la marcha de jubilados al Congreso prevista para este miércoles.

En este contexto, los médicos del Garrahan ratificaron nuevas medidas de fuerza y exigieron una ley que garantice el financiamiento estable del hospital, que depende en un 80% del presupuesto de la Ciudad de Buenos Aires.

Desde el oficialismo, las diputadas Lemoine y Santillán intentaron frenar el reclamo con duras críticas, pero sus intervenciones generaron más rechazo que respaldo. Lemoine relativizó la situación de los trabajadores de la salud con una frase que se viralizó rápidamente: “Nadie tiene por qué pagar por tus sueños. Yo soñaba con ser astronauta. ¡Quiero que me paguen mi sueño ya!”. Las redes estallaron en repudio y la diputada fue duramente cuestionada.

Juliana Santillán, por su parte, fue protagonista de uno de los momentos más tensos del debate al afirmar erróneamente que una familia tipo necesita \$360.000 para no ser pobre, cifra que en realidad corresponde al ingreso individual de un adulto, según el INDEC. Su intervención fue refutada en vivo por una médica del Garrahan: “¿Usted podría vivir con \$797.000?”, le preguntó, tras lo cual Santillán defendió una supuesta oferta oficial de $1.300.000, que la médica aclaró era un bono no remunerativo.

Las repercusiones no se limitaron a la oposición. Dirigentes libertarios y aliados del oficialismo también expresaron su malestar. El influencer Emmanuel Danann, cercano a Lemoine en el pasado, fue tajante en redes sociales: “Háganle un favor al gobierno y CIERREN EL ORTO; vos, Paola Argento y toda la murga de impresentables que se colaron en el honorable Congreso”.

Lemoine le respondió con enojo: “Le estás haciendo la segunda a los kukas en el Congreso. ¡No podés ser tan pelotudo! Me da vergüenza ajena después de todo lo que te banqué”.

También se pronunció el legislador porteño Yamil Santoro, quien recordó que Santillán fue expulsada de su espacio por “mentir en su currículum, falsificar títulos y plagiar notas”. Luego agregó: “Grave error de la diputada. Afirmó que una familia de 4 vive con $360.000. Eso es lo que necesita UN ADULTO. Para invocar datos, hay que saber de lo que se habla”.

Papelón de la diputada libertaria Juliana Santillán al hablar de la canasta básica

En los pasillos del Congreso, fuentes oficiales reconocieron el malestar que provocaron las intervenciones: “No puede decir esa pavada. A esta altura, empiezo a pensar que no es un error, que está todo armado”.

Mientras tanto, el conflicto con el Garrahan sigue sin solución, y la oposición suma presión para que se avance en una ley que garantice el financiamiento del hospital. En contraste, el oficialismo enfrenta no solo cuestionamientos externos, sino una creciente interna por los costos políticos de sus propias vocerías.