Cambiar la Constitución es la meca

El gobernador de Sante Fe, Miguel Lifschitz, reiteró, esta vez en un diario de la ciudad de Buenos Aires, que una reforma constitucional es «el tema pendiente» de su mandato y admitió que le «gustaría» ser reelecto en el cargo, posibilidad que la Carta Magna provincial prohíbe. No obstante, aclaró que solo lo intentaría si hay «un consenso político amplio». «Me gustaría ir por otro mandato», confesó el mandatario provincial en una entrevista que concedió al diario El Cronista, y agregó: «Pero tampoco avanzaría demasiado si no advirtiera un fuerte consenso político. No quemaría las naves para tratar de lograr ese objetivo. Si se diera la circunstancia, y hubiera un consenso político amplio, obviamente que en lo personal a mi me gustaría».

Lifschitz calificó la modificación de la Constitución de 1962 como «el desafío que nos queda para estos dos años» de mandato. Si bien aclaró que no impulsa modificaciones a la Carta Magna provincial «por la reelección en sí misma», ya que «sería absurdo plantear una reforma sólo por ese tema», admitió que esa posibilidad le gustaría.

Atento a las fuertes resistencias políticas -incluso en su propio partido- para avanzar con la una convocatoria a una Convención Constituyente, el mandatario santafesino aseveró que «hay una cantidad de temas en los que la Constitución de Santa Fe quedó anticuada», entre los que enumeró «medio ambiente, derecho del consumidor, Consejo de la Magistratura, participación ciudadana, elección de jueces, audiencias públicas».

La Reforma Constitucional en la provincia es un planteo de Lifschitz desde hace tiempo. De hecho, ya en diciembre de 2016 había lanzado una plataforma digital para recabar opiniones sobre una eventual modificación (www.basesparalareforma.digital).