Aunque la situación en Santa Victoria Este parece tranquila, el río Pilcomayo no cede y complica el regreso a casa de los evacuados de los parajes ubicados en la costa, mientras el paso por la ruta provincial 54 permanece cortado hacia Misión La Paz, informó el Comité de Emergencia.
Las lluvias que se registran en la zona y los niveles del río Pilcomayo, que no ceden, complican el regreso a casa de los evacuados y las tareas de reconstrucción, especialmente de las zonas más afectadas la semana pasada, como La Curvita, Monte Carmelo y Marca Borrada.
Las lluvias en el sur de Bolivia provocaron la semana pasada una crecida histórica del río Pilcomayo a la altura del municipio de Santa Victoria Este, afectando a 8.500 personas, unas 3.000 de las cuales debieron ser evacuadas a centros especiales.
La organización internacional Proadapt Gran Chaco, que monitorea los niveles del Pilcomayo, reportó que ayer se registraron nuevos desbordes en la localidad de Santa María, hasta Marca Borrada, debido a los altos niveles de Villa Montes, en el sur de Bolivia.
Por eso, los pobladores que estaban retornando a sus hogares soportaron nuevos anegamientos.
En Misión La Paz y Pozo Hondo, el Pilcomayo marcó esta mañana 6,43 metros en creciente, mientras que en Villa Montes, río arriba, estaba en 4 con tendencia a la baja.
Los voceros del Comité Permanente de Emergencia de Salta indicaron que el río no tiene una crecida estable sino en sube y baja, según los distintos sectores del cauce.
Las últimas personas evacuadas en el municipio de Misión La Paz fueron los 60 pobladores de la comunidad de El Mulato, al sur de Santa Victoria Este, que quedaron alojados en la escuela Rosario Peñaloza, de Alto La Sierra.
En tanto, la Comisión Nacional del Río Bermejo (Corebe) informó esta mañana que los cauces que constituyen la cuenca del Bermejo mantienen niveles altos, con precipitaciones importantes en el sur boliviano y el norte argentino.
Entre los ríos mencionados se destacan el Aguas Blancas, el Pescado, el Iruya, el San Francisco y El Colorado que permanecen estables aunque con niveles muy altos. El Bermejo, en la localidad salteña de Embarcación, registró ayer un pico de 4,45 metros, y hoy estaba en 4 metros en bajante, pero todavía muy alto, lo que mantiene en alerta a las poblaciones ribereñas.
Las poblaciones de la zona de desbordes del Bermejo, en los departamentos de Rivadavia, en Salta, y de General Güemes, en la provincia de Chaco, deben estar atentos porque los niveles de la cuenca alta fueron muy altos durante el fin de semana, y se espera un repunte importante en la llanura.
Condiciones climáticas
De acuerdo al último informe del Centro Internacional para la Investigación del fenómeno del Niño, recibido el pasado 8, las condiciones climáticas de La Niña continuarán durante los dos próximos meses, aunque en proceso de declinación.
No obstante, el informe estima para el período febrero-abril precipitaciones superiores a las normales, en el orden de un milímetro diario, en las cuencas altas del Bermejo y del Pilcomayo, por lo que puede prolongarse el período de crecientes en ambos ríos.
Estas condiciones de mayores precipitaciones se extienden al noreste de Salta, el oeste de Formosa y el oeste de Chaco, conformando un conjunto climático complejo para las tareas de emergencia por las inundaciones, pronóstico con el que coincide el Servicio Meteorológico Nacional.
Varias rutas salteñas presentaban inconvenientes por las precipitaciones y las crecidas de ríos y arroyos, entre las que se destaca la nacional 34, cerca de la localidad de Coronel Cornejo, donde el agua provocó una erosión importante, y el paso es por media calzada.