Consumada la mentira del Gobierno nacional de querer instalar que «una infiltrada» había rociado con gas pimienta a la niña de diez años que estaba en las adyacencias del Congreso y evidenciada la mentira televisada de la secretaria de Seguridada Patricia Bullrich no le quedó otra que dar la cara, también por TV, para explicar por qué un agente de la Policía Federal apuntó contra los ojos de Fabricia, la nena que cursa el cuarto grado de la primaria, en la represión policial del miércoles. La ministra de Seguridad tropezó con su vocabulario, al indicar que «nadie gaseó una nena» y que los policías «no ven» producto de que sus cascos le impiden la visión a la hora de apuntar con sus armas. Luego, dijo que su renuncia está a disposición del Presidente.

Con el desafío de contrastrar la evidencia visual, en su relato, Bullrich dijo que «la policía está avanzando y lo que hace es poner atrás a la nena y está tirando gases contra aquellos que habían tirado las vallas». En ese preciso momento, el periodista de LN+ que la entrevista le aclara la nitidez del momento en el que un oficial apunta contra los ojos de la víctima, pero Bullrich insiste en negarlo todo. «Nadie gaseó a una nena», dice.

«Para nosotros la realidad no es la Policía tirandole a una nena, sino que es un momento de tensión, donde en el medio habia una mamá y una nena, que los policías seguramente no vieron«, insistió la ministra. Y subrayó: «Nosotros no vamos a ir contra la Policia como muchos quieren».

No conforme con la negación ante la veracidad de las imágenes que se observan en el video, Bullrich volvió a apuntar contra la madre de Fabricia por lo ocurrido. En ese sentido, según comentó, pese a las repercusiones que generó, ver a la niña gaseada no fue su prioridad en el día del miércoles, «porque era centrarse en la victimizacion», y «la realidad es que los nenes no pueden ir a una marcha, no se pueden meter en el medio de una situación violenta».

Sin embargo, en otro tramo de la entrevista y siendo fiel a su estilo, con un discurso enredado y contradictorio, la ministra reconoció la responsabilidad del Policía al asegurar que «no lo hizo a propósito».  Y describió, refieriéndose a las imágenes: «Fijese cómo levanta la mano para tirar el gas y le sale un poco». El periodista le retruca e insiste en el accionar consciente del efectivo policial: «Baja la mano y vuelve a apretar el gatillo» hacia donde estaba la madre y la nena.

Esto desató el enojo de la expresidenta del PRO, que respondió: «El policía ve muy poco, no demos vuelta la realidad». «La agresión salió de los militantes violentos de toda la vida, y la Policia actuó a último momento cuando tiraron la vallas y quisieron entrar al congreso. Y eso no se lo permitimos», subrayó.

Por otra parte, consultada respecto al video que se difundió, en el que se intenta responsabilizar a una militante del ataque a la nena, Bullrich respondió: «Desde el Ministerio de Seguridad no mandamos ningún video. Por eso, no voy a aceptar de ninguna manera que digan que somos mentirosos», sostuvo.

Y agregó: «Hubo un error de mandar un video, que nosotros de ninguna manera avalamos ni lo difundimos en ningun tuit ni nada».

Bullrich y su tercera defensa contra la evidencia

Sin embargo, una vez más, la ministra volvió a ser puesta en evidencia puesto que, apenas unas horas antes, su secretaria de Seguridad, Alejandra Monteoliva, no solo había dado crédito al video sino que, además, había asegurado que, desde el Ministerio, «estaban trabajando en la identificación de la señora que tira el gas pimienta», dando un aval más que claro al video y deslindando a la Policía de toda responsabilidad.

«Lo avaló (al video) porque ustedes lo mostraron y ella lo vio en ese momento», fue la tibia defensa que ensayó Bullrich ante el planteo de los periodistas.

Y sumó: «Si realmente hubo un video que mandó el jefe de policia (Alejandro Rolle), voy a hablar con él, porque si manda un video sin el aval del Ministerio está cometiendo una falta. No puede mandarlo queriendo tapar una situación o no queriendo mostrar la realidad».

Eso sí, volvió a aclarar que Monteoliva no están en la cuerda floja, pese a mentir y operar para instalar una versión que no era real. Quien no podría correr con la misma suerte es Rolle.