La transición de gobiernos, que hasta el momento camina a buen paso, tuvo su primer cortocircuito. El ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, desmintió que el gobierno provincial escatime información y aseguró que el gobierno entregará su mandato con los números ordenados. Las declaraciones son en respuesta a la entrevista que Rosario/12 hizo a Felipe Michlig, senador por el departamento San Cristóbal y figura clave en el proceso de transición por parte de la gestión entrante. “Pullaro no tendrá inconveniente alguno para pagar los sueldos, aguinaldos y vacaciones de los trabajadores cuando asuma, porque les dejamos una provincia con las cuentas ordenadas”, adelantó el funcionario.

Una de las características del proceso de transición de gobierno es que desde ambos equipos vienen destacando el buen diálogo de los encuentros. Hasta el momento, un primer cónclave de la mesa de coordinación política fue el puntapié inicial que derivó en una serie de reuniones con funcionarios de Economía, Infraestructura y Seguridad para conocer los detalles más técnicos del funcionamiento y el estado de cada una de esas áreas. Las reuniones continuarán este martes con encuentros pautados entre funcionarios y equipos técnicos de diversas áreas.

Sin embargo, la transición empieza a tener algún ruido respecto a la información brindada. En diálogo con este medio, Michlig comentó que aún “falta información” para saber en qué estado se encontrarán las arcas públicas al momento de asumir, pero adelantó que prevén “una provincia con un déficit importante en las cuentas públicas y tal vez con una deuda flotante también importante”. En ese marco es que se acordó un pedido de prórroga en la presentación del presupuesto, con intención de que allí se pueda reflejar la impronta que la nueva gestión busca dar a su gobierno.

Ante esas declaraciones, Corach recogió el guante y aseguró que se está brindando información clave sobre el funcionamiento de todas las áreas, profundizando en aquellas donde se realizó algún tipo de pedido puntual. “Como ministro de este gobierno y conductor de las reuniones de transición no admito que se diga que falta información. Más bien lo contrario, sobra”, expresó en declaraciones a Rosario/12. Y agregó: “No sólo estoy hablando de mi labor, sino la de todos los ministros y ministras de este gobierno que están trabajando en contestar las requisitorias de los equipos técnicos del próximo gobierno”.

Para el funcionario a cargo de liderar el traspaso de gobierno por parte de la gestión actual, se viene trabajando “desde el primer día” en brindar toda la información relativa a las cuentas públicas del gobierno: “Nos piden reuniones, contestamos inmediatamente, nos piden información y hacemos lo propio con la mayor celeridad posible. Esa es la realidad sobre la que nos estamos moviendo y me animo a arriesgar que ninguno de los participantes puede decir lo contrario”.

No obstante, aclaró que hasta el 10 de diciembre la actual gestión sigue en funciones, con obras y procesos licitatorios que deben seguir siendo ejecutados y monitoreados. “En medio de esto también aparece la idea de un supuesto retaceo de información, acusación solapada que, supuestamente, viene de la mano del entorno de Maximiliano Pullaro”, cuestionó. “Quizás todo sea parte de una confusión o de una falsa interpretación entre transición y pretender monitorear en conjunto decisiones que nos corresponden a nosotros”, añadió.

Desde el gobierno provincial remarcaron la buena predisposición que existe ante los requerimientos de la gestión entrante. Como ejemplo, enfatizaron en dos hechos puntuales. Por un lado, el retiro de los pliegos para el nombramiento de jueces en la provincia. Por otro, la prórroga acordada en el envío del presupuesto, con la intención de que se puedan trabajar lineamientos en conjunto, algo que en 2019 el propio gobernador Omar Perotti solicitó sin éxito. En ese sentido, recordaron que una de las primeras reuniones que tuvo el traspaso de mando se dio entre el ministro de Economía, Walter Agosto, el senador provincial por el departamento General López, Lisandro Enrico, y el propio Michlig, para comenzar a compartir información clave respecto a la cartera económica.

“Hay dos grandes diferencias entre esta transición y la de hace cuatro años que le traerán gran comodidad al gobierno entrante: nuestros funcionarios están honestamente predispuestos a brindar la información que es requerida y nadie dedica tiempo ni energía para imponerle un presupuesto al gobernador entrante”, señaló Corach.

En esa misma línea, el funcionario desmintió que la gestión vaya a entregar una provincia jaqueada en términos económicos y financieros, como adelantó Michlig que podría suceder. “Pullaro no tendrá inconveniente alguno para pagar los sueldos, aguinaldos y vacaciones de los trabajadores cuando asuma, porque les dejamos una provincia con las cuentas ordenadas”, sentenció.