El ministro de Gobierno de Córdoba, Juan Carlos Massei, informó que la administración de esa provincia no adoptará «medidas de excepción ni de emergencia» en el Estado, como la de remover de las distintas áreas de Gobierno a parientes de funcionarios.
El funcionario explicó que la gestión del gobernador Juan Schiaretti no realizó en la administración pública provincial una evaluación «por parentesco» sino «por capacidad y eficiencia en la gestión», con lo cual «no va a haber ninguna medida excepcional«.
De esta manera, el gobierno cordobés desoyó el pedido del Mauricio Macri, quien instó a las provincias a imitar la decisión tomado por la administración central y que alcanzará a la totalidad de ministerios, secretarías, subsecretarías y direcciones generales del Poder Ejecutivo nacional.
En declaraciones a Cadena 3, Massei señaló que una medida de ese tipo tampoco resulta necesaria en términos financieros ya que «desde el primer día» el gobierno provincial tomó decisiones que le permitieron «tener superávit fiscal en 2016 y 2017».
Recordó, en este contexto, que «la provincia tiene 1.826 empleados públicos menos» que cuando asumió Schiaretti en 2015, y detallo que «planta de funcionarios es de 179» personas solamente.
«Nosotros respetamos absolutamente las decisiones del gobierno nacional, acompañamos la gobernabilidad y la institucionalidad. Estamos cumpliendo con el consenso fiscal«, concluyó.