El gobernador de San Luis arengó a los distintos sectores del peronismo a que se unan de cara a las próximas elecciones, sin hablar de fórmulas presidenciales ni de especulaciones. “Hay que trabajar, tenemos que juntarnos y que el pueblo nos vea unidos, porque le están diciendo que no hay 2019”, agregó.
“Contémosle al pueblo que hay 2019”. Ese fue el mensaje que envió el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, a los distintos sectores del peronismo, que hoy se encuentran en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo con la idea de avanzar hacia la unidad. “Hay que trabajar, tenemos que juntarnos y que el pueblo nos vea unidos, porque le están diciendo que no hay 2019”, agregó al detallar cuáles cree que son los próximos pasos a seguir para hacerle frente a las políticas del Gobierno de Mauricio Macri.
Al ratificar la idea que venía sosteniendo en distintas declaraciones, Rodríguez Saa desechó la hipótesis según la cual el peronismo recién retomará el poder en 2023. “Les dijeron al pueblo que no puede cumplir sus sueños, que no va a gobernar en 2019 pero eso no es cierto”, aseguró en diálogo con Radio del Plata.
El gobernador puntualizó que la mejor manera de lograrlo es sin hablar de fórmulas presidenciales ni de especulaciones, al menos por ahora, porque enfatizó que lo esencial es que el resto vea a los distintos espacios juntos. “Vamos a establecer reglas de juego y hay candidatos o candidatas, pero decirlo ahora es para que salga un imbécil a decir ‘mi limite es mengano o fulano’”, agregó.
El gobernador de San Luis defendió la idea de buscar la unidad para enfrentar al macrismo. “Ahora hay 2019, contémosle que hay 2019 al humilde, al dirigente de la unidad básica, al trabajador, al que no tiene trabajo, hay una esperanza en la Argentina, vamos a poner un amanecer, un peronismo unido con las mejores banderas, mirando al futuro”, respondió al ser consultado sobre una potencial candidatura.
Según el gobernador puntano, «esto va a levantar el entusiasmo de la militancia y generar esperanza porque la gente está muy golpeada, triste, desesperanzada, sin trabajo; y ante esta situación el peronismo no puede renunciar al poder ni mucho menos a sus banderas y su lucha tradicional».